La queratitis es una inflamación que afecta a la córnea, es decir la porción anterior y transparente del ojo. Puede estar originada por múltiples causas, una de las más frecuentes es una infección bacteriana o vírica, pero también puede ser causada por una lesión relativamente leve, como un rasguño, o por usar lentes de contacto de manera prolongada.
Los principales síntomas son:
- Enrojecimiento del ojo.
- Dolor en los ojos.
- Exceso de lágrimas.
- Dificultad para abrir el párpado a causa del dolor o la irritación.
- Visión borrosa.
- Sensibilidad a la luz (fotofobia)
- Sensación de picor, ardor o arena en el ojo.
- Hinchazón alrededor de los ojos.
- Sensación de que hay algo en el ojo.
Hay que tener cuidado ya que se pueden formar úlceras en la córnea que pueden llegar a ser graves u ocasionar disminución en la agudeza visual por alteración en la transparencia, pudiendo llegar a causar ceguera. Las personas portadoras de lentillas o las que sufren un traumatismo que afecta a la superficie anterior de la córnea, son más propensas a presentar queratitis de origen infeccioso.
Las posibles complicaciones de la queratitis incluyen:
- Inflamación crónica de la córnea.
- Infecciones virales crónicas o recurrentes de la córnea.
- Llagas abiertas en la córnea (úlceras de la córnea).
- Inflamación de la córnea y cicatrices.
- Reducción temporal o permanente en su visión.
- Ceguera.
Así que ya sabéis, si notáis cualquiera de los síntomas, pide una cita para ver a tu médico de inmediato. Te recordamos que las revisiones periódicas son la principal arma para combatir cualquier trastorno ocular.
Si queréis saber más de este trastorno ocular os recomendamos esta página: http://queratitis.org/